Hoy te voy a enseñar el resultado del dúplex con las paredes rojas. ¿Te acuerdas del vinilo del gato en el techo? ¡Ha desaparecido! Como el rojo de las paredes. Ven a ver el proceso y el resultado, puede servirte para mejorar tu casa con poco dinero y mucho DIY.
Si sigues las historias de Instagram, ya sabes como estaba antes. Tenía una habitación naranja y varias paredes pintadas de rojo oscuro.
De cara a la venta, las colores de la vivienda tienen que ser lo más neutros posible. El objetivo es que de sensación de limpieza, luminosidad y amplitud.
Por eso, el primer paso fue pintar esas paredes de blanco. El resto estaba bien. Y aquí empezó el drama. Resulta que la pintura roja estaba ahí por algo. Y es que los inquilinos que habían estado viviendo ahí tenían unos niños que seguramente serían muy majicos, pero les gustaba pintar en las paredes. Al dar la primera capa de blanco, se empezaron a notar los rayajos. Pero el pintor que se encargó de esto tenía un spray que cubre este tipo de manchas antes de seguir con la segunda capa. Esto te puede venir bien si te encuentras en la misma situación. Este es el spray maravilloso.
El otro día una seguidora me decía por Instagram que a ver qué era eso de comprar los libros según el color. Pues sí, las estanterías vacías hay que decorarlas. Y ya que compro libros de segunda mano, mejor que sean de colores bonitos.
Aunque tengo que admitir que a veces no compro libros aunque sean bonitos porque algunos títulos son tan absurdos que me da hasta vergüenza (desde novelas eróticas, a libros muy viejos de autoayuda con títulos políticamente incorrectos, manuales para el matrimonio, cosas así…)
Para que veas que cuando te digo que en los rastros te encuentras de todo, no lo digo por decir.
Los vinilos en las paredes no me gustan. Rara vez he visto un vinilo que me gustara. Creo que la excepción son los de formas geométricas, eso sí puede quedar bien, pero ¿un gato en el techo? No, gracias.
Cuando enseñé los vinilos por Instagram, varias personas me dieron un truco para quitarlos sin levantar la pintura de la pared: calentarlos antes con el secador. Lo probé y es una maravilla, se fueron muy fácilmente.
El dormitorio principal
Se que me repito mucho, pero esto es importante. Si no eres un experto, cíñete a colores neutros y claros en las paredes. Ya está. Lo demás, tendrá fácil solución.
La primera impresión
En este dúplex la primera impresión no era buena. Originalmente la planta baja estaba dividida en dos habitaciones, pero tiraron el tabique para tener un espacio diáfano. En el momento en el que me entregaron las llaves no se sabía si era un dormitorio, un comedor, o una oficina. O ninguna de las tres.
Al no poder levantar tabiques, opté por montar el salón en planta baja, para que diera esa buena impresión que todos queremos al entrar a una vivienda, y utilizar las estanterías para dividir el espacio y formar un estudio/habitación de invitados.
La verdad es que fue una suerte que la casa tuviera algún mueble mono, porque me facilitó bastante el trabajo. Estas estanterías de Ikea son muy prácticas: yo tengo una en negro en casa, pero con la mitad inferior de las puertas de madera, para ocultar algo de desorden…
¿Reconoces cosas que he ido encontrando en los rastros? Si eres fiel seguidor de las #rastrostories te sonarán muchas cosas…
Espero que te sirvan los trucos que utilizo en estos proyectos. Y ya sabes, si tienes dudas, ¡pregunta!
Hasta pronto 🙂
4 comentarios en «El dúplex de las paredes rojas»
Me encanta Irene! Ha quedado super luminoso, y ese dormitorio de la planta baja super apañado.
Reconozco todos todos los hallazgos del rastro, ja ja, algún día nos vamos a pelear por alguno ; )
Gracias guapa!! Si al final me estoy creando competencia con tantas #rastrostories jajajajaja
Maravilla! Cada día tu trabajo es mejor.
Muchísimas gracias!!!